La seguridad es un tema que atañe a todos los frentes de la sociedad en el mundo, ya que cualquier persona tiene el derecho a salir a la calle y sus diferentes espacios en libertad, sin tener el presentimiento de que su integridad física pueda ser amenazada por antisociales, entre otros factores externos que hasta nuestros días siguen presentándose para generar zozobra y pánico en la colectividad.
Los llamados a mantener la seguridad de un territorio son la policía, y diferentes cuerpos de seguridad de un país, que tienen el deber de combatir cualquier foco de violencia en la zona de su jurisdicción, para ello utilizan diferentes estrategias como patrullaje, vigilancia personal, además de los novedosos sistemas tecnológicos con los que se cuentan en la actualidad.
Por ejemplo, las cámaras de seguridad son un aliado más que calificado a la hora de saber quien ha sido el actor material e intelectual de un delito o acto de violencia en una determinada zona. Existen países donde se cuentan con cámaras de seguridad tanto en las ciudades, como carreteras y autovías, con el objetivo de que a través de la tecnología, los distintos cuerpos de seguridad puedan ser más eficientes a la hora de hacer su trabajo.
Estas herramientas permiten generar confianza en la sociedad, ya que para hacer cohesión, tanto la Policía Nacional, Policía Regional, Guardia Civil, entre otros componentes en el caso del territorio español, deben coordinarse y de esta manera mejorar su reputación ante la sociedad, y de esta manera esta pueda sentirse más segura al momento de andar por las calles, porque sabe que las autoridades competentes están en acción ante cualquier alarma o momento que busque producir pánico.
Por supuesto que los gobiernos del mundo son los llamados a fortalecer sus distintos cuerpos de seguridad, no solo para protección de los diferentes funcionarios, sino principalmente de la población. Ciertamente no deben descuidar otros frentes de alta importancia, pero el tema de la seguridad no puede estar en segundo plano, ya que fomentar la paz en todo el territorio es una de las tareas principales de cualquier gobernante.
Función de las alarmas
En el pasado la sociedad utilizaba lo que tenía a la mano para poder generar sistemas de alerta ante cualquier situación de robo o delincuencia en acción a un determinado lugar. Por ejemplo, contar con perros guardianes era una excelente alternativa, ya que tienen unos sentidos bien agudos, y pueden intuir situaciones irregulares generadas por antisociales. Precisamente el ladrido de los caninos sirve incluso hasta nuestros días como sistema de alarma ante una situación fuera de lugar.
Muchas casas, locales y diferentes establecimientos contaban en el pasado con perros guardianes que alertaban de robos, y alertaba a la policía para que actuara y pudiera detener a los responsables de los hechos. Actualmente muchas personas cuentan en sus hogares con perros guardianes que cumplen la misma función, no obstante, existen sistemas más actualizados que pueden prevenir acciones de robo, atentados, entre otras situaciones que alteren el orden de un lugar público o propiedad privada.
Una alarma puede definirse como un aparato que tiene como propósito dar aviso a las personas de que existe una situación que altera el orden y tranquilidad del sitio donde se encuentran. La alarma no tiene la facultad de resolver la situación, pero alerta a las personas, e incluso puede dar parte directamente a la policía y demás cuerpos de seguridad de que algo fuera de lo normal se encuentra ocurriendo, afectando de una u otra manera a una persona, grupo de personas o establecimientos.
Por lo antes expuesto es importante agregar que las alarmas son de vital importancia para mantener la seguridad de una casa, local, negocio sitios de esparcimiento y ocio, entre otros lugares. Una alarma puede marcar la diferencia entre una situación irregular y una tragedia, porque la acción de grupos criminales organizados pueden provocar momentos de angustia en un determinado lugar, para ser más específicos, dichos grupos tienen el entrenamiento y preparación para a través de una bomba efectuar actos de terrorismo, donde se pierden gran cantidad de vidas humanas y recursos materiales.
Un ejemplo de lo que mencionamos es lo sucedido aquel 11 de septiembre del año 2001, donde grupos terroristas atentaron con aviones a las Torres Gemelas con aviones, los cuales impactaron contra una de las estructuras más icónicas de la ciudad de Nueva York y los Estados Unidos de América.
En esta acción se demostró que los sistemas de alarma de los cuerpos de seguridad norteamericanos fallaron, porque aviones de combate violaron el espacio aéreo de la nación americana y una de las principales potencias militares del mundo. Por supuesto, este atentado no solo acabó con ambos rascacielos, sino que acabaron con la vida de miles de personas inocentes que no tenían ni la más remota idea de lo que estaba por acontecer.
Hasta el presente esta situación se recuerda con mucho dolor en los Estados Unidos y muchas partes del mundo, debido a la magnitud del saldo de víctimas que dejó. Esto dejó un precedente para los diferentes gobiernos y cuerpos de seguridad de lo que puede suceder al burlar todos los sistemas de alerta de situaciones irregulares. Luego de esto han surgido nuevos actos de terrorismo, pero el impacto de lo ocurrido en las Torres Gemelas de Nueva York dejó huellas en el planeta.
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